En general, si logras mantener tus dientes y encías sanas durante el embarazo, es probable que le evites problemas dentales futuros al bebé.
Por todo lo anterior es fundamental que extremes el cuidado tu boca y tomes medidas como las siguientes:
• Cepíllate los dientes al menos dos veces al día y usa hilo dental por las noches.
• Utiliza pasta de dientes fluorada de al menos 1.200 – 1.400 partes por millón de flúor.
• Visita al menos una vez al dentista durante el embarazo para determinar si tienes algún problema bucodental y a partir de ahí establecer con detalle el tratamiento o los cuidados que debes seguir.